

Cultivadores de orquídeas de Taiwán resisten mientras los aranceles de EEUU se disparan
Desde el inicio de la guerra comercial desatada por Donald Trump, el cultivador de orquídeas taiwanés Lee Tsang-yu ha visto cómo los aranceles estadounidenses sobre sus hermosas flores se disparan de cero al 20%.
Sin embargo, tras superar numerosas crisis económicas, este experimentado agricultor de 61 años se mantiene firme.
Lee está cultivando nuevos mercados en Tailandia y expandiéndose en Vietnam, Indonesia y Brasil, al tiempo que reduce los envíos a Estados Unidos.
"Estados Unidos es un mercado tan grande que no podemos retirarnos, y no lo haremos", afirma Lee, cuya empresa, Charming Agriculture, opera cuatro grandes invernaderos en Houbi, un distrito de la ciudad sureña de Tainan.
Los más de 300 cultivadores de orquídeas de Taiwán se encuentran entre los mayores productores mundiales de estas plantas de hojas gruesas, y las Phalaenopsis, también conocidas como orquídeas mariposa, dominan las exportaciones.
Las ventas de orquídeas de la isla alcanzaron los 6.100 millones de dólares taiwaneses (204 millones de dólares estadounidenses) en 2024, con una tercera parte en envíos a Estados Unidos, su mayor mercado, según datos oficiales.
Hasta ahora, la mayoría de los cultivadores han estado absorbiendo el costo del arancel del 10% que Trump impuso a casi todos sus socios comerciales en abril, según Ahby Tseng, secretario general de la Asociación de Cultivadores de Orquídeas de Taiwán.
- "Nadie puede soportar" -
Pero, añade, "nadie puede soportar" el gravamen temporal del 20% que el presidente estadounidense anunció la semana pasada para Taiwán.
Tseng señala que el principal rival de la isla en Estados Unidos es Países Bajos, que se ha visto afectado por una tarifa relativamente más leve, del 15%.
Esta diferencia de cinco puntos porcentuales es significativa, considera.
"En realidad, es muy difícil trasladar inmediatamente el costo a los consumidores, ya que estos pueden optar por no comprar o por adquirir otros tipos de flores", dice Tseng.
Además, almacenar orquídeas en un depósito no era una opción, dado que las plantas "siguen creciendo".
Aunque el aumento de los aranceles mermaría sus beneficios, Lee afirma que le preocupaba más la situación general de la economía estadounidense desde la llegada al poder de Trump.
"Todo se ha encarecido en Estados Unidos y el gasto de los consumidores se está reduciendo, eso es lo que me preocupa", explica.
"Desde finales de mayo, ya hemos reducido los envíos en un 15%. Antes de eso, Estados Unidos representaba el 45% de nuestras exportaciones", sostiene.
Lee se muestra optimista y afirma que sus esfuerzos por expandirse a otros mercados, aunque lentos y no siempre tan lucrativos, "compensarán gradualmente este impacto".
Las orquídeas de Taiwán también tienen una ventaja competitiva, según él, ya que sus flores duran más que las plantas holandesas.
Además, argumenta, "Trump no será presidente para siempre".
I.Pumehana--HStB