

La UE apresta sus represalias a los aranceles de EEUU, pero aún confía en un acuerdo
La UE decidió este jueves exhibir los músculos de la respuesta que prepara a los aranceles previstos por Estados Unidos, pero insistió en que aún confía en la posibilidad de un acuerdo negociado.
Un vocero de la Comisión Europea, el brazo ejecutivo de la UE, apuntó este jueves que un acuerdo entre Bruselas y Washington "está al alcance de la mano" para evitar una escalada de aranceles con consecuencias imprevisibles.
"En lo que se refiere a un acuerdo o un resultado, creemos que tal resultado está al alcance" de la mano, dijo este jueves el portavoz de la Comisión Europea para temas de comercio, Olof Gill.
Sin embargo, esta declaración fue formulada poco después que 26 de los 27 países de la UE respaldaron el conjunto de medidas de represalia a Estados Unidos si las conversaciones no resultan exitosas.
Con la oposición de Hungría, el resto de los países del bloque apoyaron un enorme paquete de represalias por unos 93.000 millones de euros, equivalentes a unos 109.000 millones de dólars.
Estas medidas de represalia a los aranceles del 30% que EEUU pretende imponer a productos de la UE, entrarían en vigor el 7 de agosto, si las conversaciones no arrojan un resultado positivo.
Este paquete contempla aranceles a productos aeronáuticos, químicos y farmacéuticos, como parte de una enorme lista.
Además, de acuerdo con fuentes diplomáticas, la UE también trabaja en elaborar un conjunto de represalias específicas para el sector de los servicios, segmento en el que podría golpear duramente a gigantes tecnológicos y al sector bancario.
El paquete respaldado este jueves incluye medidas de respuesta ya definidas previamente, por unos 21.000 millones de euros, que responden a los aranceles adoptados por Estados Unidos al acero y el aluminio proveniente de la UE.
- La bazuca como disuasión -
Las medidas de represalia de la UE están diseñadas para responder a un arancel general del 30% a productos estadounidenses, de acuerdo con el testimonio coincidente de varios diplomáticos.
La idea es que la definición de este paquete de contramedidas sirva "para apoyar las negociaciones, no para escalar tensiones", dijo la fuente diplomática.
Desde que el presidente estadounidense Donald Trump anunció la nueva política comercial de su país, basada en pesados aranceles a productos importados, la UE se ha empeñado en negociar una salida que evite una guerra comercial.
El comisario europeo de Comercio y principal negociador de la UE, Maros Sefcovic, realizó varios viajes a Washington y mantiene contacto telefónico permanente con autoridades estadounidenses para allanar un camino.
Sin embargo, países influyentes de la UE, como Alemania y Francia, presionan para que el bloque adopte una respuesta firme a las amenazas arancelarias o comerciales de EEUU.
La UE dispone de un recurso conocido en Bruselas como "la bazuca", formalmente denominado Mecanismo AntiCoerción, adoptado en 2023 y de efectos simplemente demoledores.
La UE considera al Mecanismo una herramienta de "disuasión", y otorga poderes para imponer aranceles a productos y servicios, y hasta imponer restricciones el acceso de terceros países al mercado europeo.
Gill dijo este jueves que el Mecanismo es "el más poderoso elemento disuasorio" de la UE, y desde su adopción nunca ha sido efectivamente activado.
O.Kawai--HStB