

Alexandre de Moraes, el poderoso juez brasileño en la mira de Trump
Poderoso, implacable y polémico, el juez del supremo Alexandre de Moraes se ha convertido en una figura emblemática en Brasil al conducir el juicio contra el expresidente Jair Bolsonaro por golpismo, lo que lo puso en la mira de Donald Trump.
Su calva que brilla bajo los focos y mirada severa contribuyen a una imagen de juez de mano dura. Pero tras bambalinas, este magistrado de 56 años es descrito como un hombre simpático y gracioso.
En un país polarizado, algunos acusan a Moraes de censura y abuso de poder, mientras que otros elogian su defensa incesante de la democracia frente a los repetidos ataques de Bolsonaro y sus partidarios contra las instituciones.
El exmandatario de extrema derecha, quien ha declarado ante el juez por acusaciones de intento de golpe de Estado contra el presidente Luiz Inácio Lula da Silva en 2022, lo tilda de "dictador".
El gobierno estadounidense de Trump suspendió en julio de 2025 la visa de Moraes y le aplicó la ley Magnitsky, un instrumento para sancionar financieramente a personas acusadas por la Casa Blanca de violaciones graves a los derechos humanos.
Pocas semanas antes, Trump había anunciado aranceles punitivos de 50% a Brasil, bajo el argumento político de que Moraes y otros jueces de la corte dirigen una "caza de brujas" contra Bolsonaro.
El diputado Eduardo Bolsonaro, quien se mudó a Estados Unidos y hace campaña para que Trump interceda por su padre Jair Bolsonaro, ha calificado a Moraes como "un psicópata sin límites".
- "Animal político" -
El magnate Elon Musk llegó a compararlo con Voldemort, el villano (también calvo) de la saga Harry Potter, acusándolo de socavar la libertad de expresión.
El año pasado, los dos hombres protagonizaron un largo pulso que culminó con la suspensión durante 40 días de la red social X, de la cual Musk es propietario, por ignorar una serie de decisiones judiciales.
También ha librado una batalla contra la proliferación de discursos de odio en internet.
"No podemos permitirnos que ese mundo virtual se transforme en una tierra sin ley, en que el racismo, la misoginia, el nazismo puedan tratarse como libertad de expresión", ha dicho Moraes.
Su ascenso como némesis de los conservadores no era el destino más esperado para este abogado constitucionalista y profesor de Derecho de la Universidad de Sao Paulo.
Durante su paso como secretario de Seguridad del Estado de Sao Paulo, entre 2015 y 2016, fue criticado por la izquierda, que lo acusaba de reprimir los movimientos sociales.
Llegó al supremo en 2017 nombrado por el expresidente de centroderecha Michel Temer (2016-2018), de quien fue ministro de Justicia.
"Es un animal político", afirmó a la AFP Antonio Carlos de Freitas, experto en derecho constitucional.
"Navega bien por varios ambientes, incluyendo las fuerzas armadas", confesó una fuente que trabajó con él en la justicia electoral.
El gesto adusto de Moraes cuando sesiona en la corte contrasta con la sonrisa que ofrece a los estudiantes de la universidad que lo abordan en busca de una foto con el juez más conocido de Brasil.
- Presunto plan de asesinato -
En junio de 2023, como presidente del tribunal electoral, Moraes declaró a Bolsonaro inelegible por ocho años por propagar información falsa sobre el sistema de urnas electrónicas en Brasil.
Hoy es relator en el supremo del juicio contra el exmandatario, acusado de haber liderado un fallido plan de golpe de Estado para evitar el regreso al poder de Lula.
Este plan preveía, según los investigadores, el arresto, e incluso el asesinato de Moraes, así como de Lula y de su vicepresidente, Geraldo Alckmin.
"Moraes se ha arrogado el derecho de ser juez y parte en una caza de brujas ilegal contra ciudadanos y empresas estadounidenses y brasileños", afirmó el secretario estadounidense del Tesoro, Scott Bessent.
- Muay-thai -
Parco en comentarios a la prensa, el magistrado prefiere expresarse durante las sesiones de la corte suprema.
Casado, padre de tres hijos y practicante del arte marcial muay-thai, puede ocupar el cargo en el más alto tribunal de Brasil hasta los 75 años.
Su nombre ha sonado como posible candidato a la presidencia de Brasil, pero Moraes nunca lo ha mencionado públicamente.
J.Manu--HStB