Honolulu Star Bulletin - Más de 50 ºC en Turquía: "nadie puede acostumbrarse a un calor así"

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Más de 50 ºC en Turquía: "nadie puede acostumbrarse a un calor así"
Más de 50 ºC en Turquía: "nadie puede acostumbrarse a un calor así" / Foto: Ilyas AKENGIN - AFP

Más de 50 ºC en Turquía: "nadie puede acostumbrarse a un calor así"

Nunca en su vida Recep Esiyop, de unos 60 años, había visto unas temperaturas así en Turquía. "No hay ni un alma durante el día, nadie puede acostumbrarse a un calor así".

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Desde que el récord de 50,5 ºC reportado el 25 de julio situara a Silopi, en el sureste de Turquía, en el mapa de los extremos, este vendedor de helados vive con el aire acondicionado puesto constantemente y empieza a estar preocupado por la factura de electricidad.

Y más teniendo en cuenta que la ola de calor se prolongará por lo menos hasta el 2 de agosto, según las autoridades. Aunque también hay quien cuestiona sus previsiones.

"El termómetro prácticamente no ha bajado de los 50 ºC", asegura Hacil Coksun. "Y cuando los funcionarios anuncian 49 o incluso 51, créanme, probablemente estábamos por encima de los 55 ºC. Por lo menos".

Desde mediados de julio, las temperaturas en Turquía son entre 6 y 12 grados mayores a la media estacional, según la Dirección General de Meteorología (MGM). En la mayor parte del territorio, el mercurio rebasa los 40 ºC.

Las olas de calor, cada vez más frecuentes, largas e intensas, constituyen una evidencia clara del cambio climático, según los expertos.

Combinadas con la sequía, "la peor en cinco años" según el presidente Recep Tayyip Erdogan, dieron lugar a más de 3.100 incendios forestales desde que empezó el verano boreal.

Al menos 14 personas murieron a causa del fuego, pese a la movilización de drones de vigilancia en zonas forestales. Para el jefe del Estado, el país enfrenta una "guerra" contra "el cambio climático".

- El aire acondicionado, "tan esencial como el pan y el agua" -

Y mientras que lugareños como Hacil Goskun insisten en que las autoridades "podrían atenuar las cosas plantando árboles" en la zona, cuyos habitantes tienen la situación de vivir dentro de una estufa, el Parlamento turco acaba de aprobar una ley que permite que algunas tierras agrícolas, incluyendo olivares y bosques forestales, se conviertan en explotaciones mineras. Una iniciativa que provocó gran enojo entre los activistas ecologistas.

Sudando frente a su puesto de döner (un asador de carne vertical), Cemil Seher, de 51 años, reclama rebajas en las tarifas de electricidad.

"Antes, el verano duraba tres meses, ahora son cinco. El aire acondicionado funciona las 24 horas del día. Lo considerábamos un lujo pero hoy en día es absolutamente necesario, como los frigoríficos", explica.

"Las facturas de electricidad son muy altas. Aquí no saco ningún beneficio; cinco meses al año trabajo solo para pagarlas", sostiene Seher, reclamando una tarifa especial "no solo para Silopi, sino para toda la región".

"Aquí, el aire acondicionado se ha convertido en algo tan esencial como el pan y el agua", insiste.

A.Aloha--HStB